sábado, 30 de marzo de 2019

Clases de mes de marzo

Día 22 de marzo:
Continuamos con el cuento de Borges. Nueva lectura.
Se dictó (para completar) desde la teoría literaria, otros elementos del análisis de la narración.
Libro: El viejo oficio de contar historias, de Alicia Montes de Faisal, Editorial Kapeluz.

Día 25 de marzo: por la mañana, reunión plenaria.

Día 29: Lectura de  un texto, incluido en el Libro N° 3 de la Colección de Lengua y Literatura Polimodal, Editorial Longseller:

   Los científicos aún no han podido establecer con certeza las causas que, en la antigüedad, producían la piroclasis, enfermedad mortal que aniquilaba al hombre en el día. Atacaba sigilosamente, por la mañana, con los mismos síntomas de un simple estado febril que paulatinamente se iba agudizando hasta llegar, por la noche, a producir la muerte.
    Se estimaba  que el agente patógeno de esta terrible enfermedad era el mismísimo demonio.
   Durante la Inquisición se consideraba lícito matar a quien amaneciera afiebrado, lo cual no era precisamente una solución, ya que la piroclasis o Mal de los Muertos se incubaba hasta el momento de morir. Sus efectos se manifestaban postmortem.
   Si al expirar fosforecía el cuerpo del difunto, inmediatamente se lo trasladaba a un lugar al aire libre. El cadáver se hinchaba y abrillantaba gradualmente hasta explotar en pedazos que se perdían en el cielo como una lluvia de fuegos artificiales.
   El hecho  angustiaba a los sepultureros y fascinaba a los pirománticos, quienes según las estelas trazadas en el firmamento por las diferentes partes del cuerpo, elaboraban la carta mortal que vaticinaba cómo sería  la vida del finado en el más allá.
   Más tarde a los pirománticos se les acusó de herejes. Sus cartas mortales y demás estudios realizados acerca del Mal de los Muertos fueron a parar, junto con ellos, a la hoguera.
   Los científicos jamás podrán explicar el verdadero origen de la piroclasis puesto que todas sus hipótesis parten de un mismo error: considerar al hombre como receptor de una enfermedad que en realidad no atacaba a los seres humanos.
                                                         JUAN CARLOS GARCÍA REIG, en Bacará

La consigna: "Lean el texto y luego pensar entre todos si podría decirse que es literario y por qué. Escribir las razones que han dado y las conclusiones a las que han llegado".

1 comentario: