lunes, 22 de julio de 2019

Mitología


¿Qué es la Mitología?
   La Mitología es un discurso o tratado sobre las fábulas, o mejor, sobre los mites o mitos de los antiguos, que no siempre daban a esta palabra el sentido fabuloso y alegórico que los modernos le han concedido. Se comprende también bajo este nombre al conocimiento general de las creencias y religiones antiguas o primitivas, de sus misterios, de sus ceremonias, y del culto con que honraban a sus dioses y héroes, como así mismo las diferentes alegorías de los poetas, de los artistas y de los filósofos.
¿Cómo llegaron los mitos a nosotros?
   Los griegos no tuvieron un libro sagrado como el Popol Vuh de los indios quiché o la Biblia del pueblo hebreo, sino que todas estas historias circulaban oralmente, y algunas fueron tomadas por los poetas para componer epopeyas o tragedias, de ese modo es como llegaron hasta la actualidad.
¿Cómo se clasifican los mitos?
   Existen distintas clases de mitos:
-        Cosmogonías: relatan el origen del universo.
-        Teogonías: narran el origen de los dioses.
-        Antropogonías: explican el origen del hombre.
   Pero también suelen incluirse en el dominio de la mitología, las leyendas etiológicas y los ciclos heroicos:
-        Leyendas etiológicas: también llamadas mitos de origen, explican el nacimiento de un fenómeno específico, como el eco o la música, o bien, de algún elemento de la naturaleza local, como un río o una montaña.
-        Ciclos heroicos: son las narraciones protagonizadas por un mismo héroe.
¿Qué tipos de personajes aparecen?
   Un mito es un relato tradicional que se refiere a unos acontecimientos prodigiosos, protagonizados por seres sobrenaturales o extraordinarios, tales como dioses, semidioses, héroes, monstruos o personajes fantásticos, los cuales buscan dar una explicación a un hecho o fenómeno.
    Los dioses, si bien podían dominar las fuerzas de la naturaleza y eran inmortales, se parecían mucho a los humanos en cuanto a que experimentaban las mismas pasiones: celos, ira, amor, rencor, etc., y también tenían defectos y virtudes.
¿Qué concepción de tiempo  tenían los antiguos?
   Existen dos clases de tiempo:  el tiempo del mito, circular y repetitivo; y el tiempo sucesivo, la duración temporal ordinaria.
   El hombre mítico encuentra una relación muy estrecha entre el nacimiento y la muerte. Para él, la muerte es un volver al origen, un volver a nacer. Porque en el origen, en el instante de la creación, se encuentra el principio y el final de todas las cosas.
   La concepción mítica del tiempo determina la manera de estar en el mundo. Permite al hombre confrontar el presente con el momento feliz y armónico de la creación. Al tiempo que toma conciencia de la insatisfacción y el drama del momento que vive, adquiere la certeza de que ese drama es posible superarlo volviendo al origen. De esta manera, el hombre mítico entiende que su estar en el mundo sólo tiene sentido en la medida en que, con su actuar, rememora y reconstruye el equilibrio del tiempo primigenio.
   Al lado del tiempo mítico, existe el tiempo lineal, ordinario y cotidiano.
¿Cómo concebían los hombres antiguos a los mitos?
   El pueblo griego era profundamente religioso y los mitos se rememoraban en todas las manifestaciones festivas de la colectividad. Los mitos proporcionan una interpretación del mundo y, en ese sentido se relacionan con la religión, como creencias colectivas que transmiten cierta imagen del mundo previa a los saberes racionales, a las técnicas y ciencias.
  
¿De qué se trataba la Ilíada y la Odisea?
      La Ilíada. La obra consta de 15.693 versos y está organizada en 24 cantos o rapsodias. La acción transcurre en Troya (Ilión para los griegos) y cuenta la historia de Aquiles, hijo del rey Peleo y la nereida Tetis. Su cólera lo enfrenta a Agamenón, jefe de los aqueos, quien le ha robado su parte del botín y a la joven sacerdotisa Briseida. Enojado, Aquiles se niega a seguir colaborando con el ataque a Troya, aunque Telamonio, Odiseo y dos heraldos son enviados para pedirle disculpas, entregarle regalos y devolverle a Briseida.
   Entre tanto, Paris, hermano de Héctor, el jefe de las tropas troyanas, desafía al aqueo Menelao y, ayudado por la diosa Afrodita, lo vence y se queda con su mujer, Helena, de singular belleza.
   Patroclo, compañero de armas de Aquiles, hace huir a los troyanos, pero es asesinado por Héctor. Para vengar la muerte de su amigo, Aquiles se reconcilia con Agamenón y vuelve a la lucha. Los dioses también pelean entre ellos, unos a favor de los aqueos y otros, de los troyanos. En un enfrentamiento, Aquiles mata a Héctor, ata el cadáver a su carro de combate y da vueltas alrededor de la ciudad.
   Tras el funeral de Patroclo, Aquiles continúa amedrentando a los troyanos con el maltrato del cadáver de Héctor. Príamo, rey de Troya, se dirige al campamento griego para suplicarle la devolución del cuerpo de su hijo. El vencedor acepta y se celebran los funerales de Héctor.
    La Odisea. A Odiseo, guerrero astuto y valiente que participó del ataque a Troya, se debe el ardid que permite conquistar la ciudad mediante el célebre caballo de madera. Los héroes griegos, vencedores en Troya, regresaron a sus tierras. Existieron numerosos relatos de las travesías que emprendieron y de las circunstancias adversas  que atravesaron, pero solo se conserva la historia de Ulises u Odiseo, rey de Ítaca. Tras veinte años de ausencia y muchas experiencias vividas (su encuentro con el gigante Polifemo, la huida tras escuchar el canto de las sirenas, el encuentro con seres monstruosos, como los Lestrigones, los Lotófagos, los Cíclopes; su estadía en el palacio de la diosa Circe, la furia de  Poseidón y la visita al Hades, el reino de los muertos, para consultar el espíritu del adivino Tiresias),  finalmente el héroe arriba a su palacio donde lo aguardan su hijo Telémaco y su mujer Penélope. Asediada por numerosos pretendientes que deseaban tomarla por esposa, Penélope había resistido diciéndoles que solo se casaría cuando acabase una labor de tejido. Todas las noches, la fiel esposa destejía lo hecho para volver a tejer al día siguiente. Al igual que las Moiras, las diosas que tejían el destino de los hombres, Penélope teje y desteje congelando el tiempo de sus pretendientes, a fin de esperar a su esposo y alcanzar su destino anhelado.
   Por su parte, Ulises es el héroe que se adapta a cada circunstancia, que pone en juego mil recursos y, a diferencia de Aquiles, que nunca cambia, logra escapar de las prisiones de mágicas hechiceras, vence la crueldad del salvaje Polifemo o se defiende de las sirenas, y vive experiencias maravillosas. Su mundo mítico es fruto del ingenio, de los recursos del hombre puestos en acción.
   A diferencia de La Ilíada, en La Odisea no hay combate heroico. Si bien los hombres mueren, el poema está centrado en la vida, en la aventura, en las muchas posibilidades que se ofrecen a la inteligencia del héroe que reflexiona, medita, y encuentra la forma de vencer los obstáculos. La Odisea es un símbolo del héroe mortal, que sufre y aprende, que enfrenta desafíos y que vence la adversidad.
¿Cuáles son los principales dioses y semidioses griegos correspondientes de los romanos?
   Principales dioses:  el más importante y poderoso de  ellos era Zeus, que presidía las asambleas divinas de las que participaba su esposa (y hermana) Hera, la diosa de la fecundidad; Apolo, el dios de la Medicina, la música y los oráculos; Poseidón, el dios del mar; Démeter, la diosa de la agricultura; Ártemis, la diosa de la caza y la virginidad; Afrodita, la diosa del amor; Ares, el dios de la guerra; Atenea, la diosa de la inteligencia y la sabiduría; Hefesto, el dios del fuego; Hestia, la diosa del hogar; y Hermes, el dios del comercio y mensajero de las deidades.
¿Qué es un héroe para los antiguos?
   Todos los héroes siguen un camino de pruebas y superación, que es lo que los convierte en héroes; el héroe no nace, sino que se construye a partir de la experiencia.
   Los grandes héroes cantados por la épica y evocados en las tragedias son de características muy diversas: héroes aventureros y civilizadores que abren caminos y los despejan de monstruos, como Heracles (Hércules, para los latinos), Jasón, Teseo y Odiseo, o héroes guerreros que luchan en batallas o asedios en torno a una ciudad, como Agamenón, Aquiles, Polinices y Ayax. Pero son seres extraordinarios, emparentados con los dioses, que actúan en un marco de posibilidades superior al de la realidad natural. Así, a Heracles lo caracteriza una enorme fuerza; a Aquiles, la velocidad en combate y a Odiseo, su inteligencia y astucia para tramar salidas frente a situaciones adversas y lograr el triunfo.
   Los dos personajes centrales de la Ilíada, Aquiles y Héctor, estaban destinados a vivir una vida corta, y los dos lo sabían. Eran héroes, no porque ante el llamamiento del deber marcharan sin dudar ni temer, sino porque decidieron enfrentarlo a pesar de todo.
Bibliografía:
-        Mitos y leyendas. De los terribles dioses griegos. “La ira de los mares”. Iris Rivera.
-        Literatura “Las miradas míticas, épica  y trágica” Serie Enfoques. Graciana Centron y María Virginia de Hard. Longseller.
-        Literatura 4 ES. Elsa Leibovich y Carlos Yujnovsky. Tinta Fresca.  Buenos Aires, 2011-
-        Los mitos griegos I. Robert Graves. Alianza Editorial
-        Talento 4. Castellano y Literatura.
-        Las aventuras de Ulises. Horacio Dominguez
-        La Odisea. El increíble viaje de Ulises para regresar a su amada Isla Ítaca.

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